LA DIMORPHOTHECA (Osteospermum) Una planta todoterreno

La dimorfoteca es una planta herbácea que no desarrolla troncos sino tallos verdes algo pelosos o tomentosos, aunque cuando es adulta, los tallos mas viejos sí se vuelven algo leñosos.

Es de hoja perenne y de porte erguido aunque de poca altura (hasta los 50cm) por lo que resulta muy adecuada para rocallas, borduras y otros lugares donde necesitemos cubrir el suelo.

Sus hojas son carnosas, de borde irregular.

Sus flores son compuestas, como grandes margaritas de diferentes tonalidades del blanco al morado pasando por el rosa, el fucsia y el lila.

En climas cálidos y templados florece a lo largo de todo el año aunque más abundantemente en primavera y verano.

Resiste todos los climas excepto los muy fríos. Por  debajo de -5º puede morirse pero queda la opción de cultivarla en maceta y protegerla en invierno.

Le gusta el sol pero crece y florece también perfectamente en semisombra.

Aguanta todo tipo de suelos, desde los muy alcalinos hasta los arcillosos o arenosos con tal de que estén bien drenados y no se encharquen ya que es una planta que requiere poco agua.

Cuidados

Los mínimos que puedan imaginarse. Solo hay que eliminarle las flores secas y podarla después del verano recortando los tallos, cortando siempre por encima de algún brotecito nuevo sin dejar muñones, dejándolos lo más cortos posibles.

Reproducción

Tengo que decir que nunca he necesitado preocuparme por reproducirla ya que ella sola lo hace con mucha facilidad. En las fotografías siguientes se ve cómo han surgido de forma espontánea, semilleros de plantitas al lado de plantas adultas que florecieron y eso que a veces el terreno y las condiciones de sequía no acompañaban.

Para que el color de las flores de la nueva planta sea como el de la antigua, la forma de reproducirla es mediante acodo de los tallos maduros. La misma planta los deja caer sobre la tierra y emite raíces en los nudos.
También se reproduce por esqueje.

Si queremos trasplantar de lugar una de esas nuevas plantas acodadas, cuanto más joven sea, mejor. Se corta con las tijeras el tallo que la une a la planta madre y se saca con un poco de tierra cuidando de no dañar las raicillas.

Los ejemplares adultos, resisten mal el trasplante. La época ideal para hacerlo es la primavera o el otoño.

Los días posteriores al trasplante, debemos regarla bien para que arraigue; después el riego puede ser mínimo.

Cuando llega el momento en que la planta se pone fea y desaliñada, se poda drásticamente y volverá a brotar fuerte y vigorosa.

Todas las dimorfotecas que se ven en las fotos son de nuestro jardín (como el resto de fotos que publico en este blog) y vereís  cómo de la primera y única que compré, de color rosa, han salido de varios colores al reproducirse ellas solas por medio de semillas.

* Si deseamos reproducir un color determinado, tenemos que utilizar el método del acodo o del esqueje pues con semillas el color es aleatorio.