Ombligo de Venus (Umbilicus rupestris)


A veces he escrito entradas lamentándome de nombres horribles con los que bautizan a algunas plantas silvestres pero con la que os muestro hoy, afortunadamente, no ocurre lo mismo.

 ¿No os parece un nombre precioso a la vez que apropiado el que le han dado a esta hermosa planta de la familia de las Crasuláceas?

Realmente sus hojas de largos peciolos, carnosas y redondas, bordeadas de un delicado festón y con una depresión en el centro, son tan hermosas, que no pueden sino recordar el ombligo de una diosa.

Las inferiores están dispuestas en roseta y son de mayor tamaño; las superiores están dispuestas en el tallo de forma alterna y son más pequeñas.

Sus flores son muy sencillas y discretas de un color amarillo verdoso que las hace pasar casi desapercibidas. Están formadas por un cáliz con cinco sépalos y una corola con 5 pétalos soldados y cuando maduran, penden hacia abajo como si fuesen campanas.



Siento no disponer de un buen macro para mostrar cómo en el centro de la corola se ven 10 estambres y 5 carpelos con largos estilos pero no importa; lo que realmente destaca de ellas es su majestuosa disposición en racimo a lo largo del tallo.


Dicho tallo, generalmente es único pero a veces crece doble y puede llegar a alcanzar los 50cm de altura aunque lo normal es que se quede alrededor de los 30cm.



El ombligo de Venus es una planta perenne que apenas necesita terreno en el que sustentarse. Crece en cualquier pequeña fisura o grieta de las rocas, y sobre todo en paredes y muros de piedra aunque si llega el caso, le vale cualquier otro muro como puede verse en la siguiente fotografía.


¿Y cómo puede sobrevivir e incluso medrar en semejantes lugares? Pues como lo hacen todas las de su familia, las Crasuláceas: almacenando en sus hojas agua y nutrientes cada vez que llueve para las épocas de escasez. Todo un ejemplo de ahorro y aprovechamiento de recursos.

Florece desde mediados de la primavera hasta mediados del verano pero sus rosetas están bonitas en cualquier época del año aunque no tengan flores.

Le encantan la luz y el calor del sol aunque también las he visto crecer a la sombra.


Antiguamente fue una planta muy apreciada por sus propiedades medicinales entre las que se encuentran la curación de heridas, llagas, sabañones, granos, verrugas y hasta hemorroides. No hay más que ver otro de los nombres vulgares por los que se la conoce “hojas de curalotodo”

Por lo visto es comestible aunque yo, sinceramente, no lo tengo comprobado. También aseguran que el zumo que se obtiene de la maceración de sus hojas, es diurético.

Mi amigo José Romero, que tiene un blog dedicado a las plantas medicinales, publicó hace tiempo una entrada muy completa sobre ellas que podéis consultar en este enlace: Naturconsejos.

Yo no he aportado con mi página nada que no se sepa ya pero deseaba dedicarles una en especial como homenaje de agradecimiento ya que crecen espontáneas por los muros y roquedos de nuestro jardín y nos proporcionan el placer de disfrutar de su presencia.

Comentarios

La Biosfera de Lola ha dicho que…
Querida Lidia esta creo que es una de las plantas más abundantes que existen en mi tierra, la hay por todas partes y aquí el uso más común que tenía era para el dolor de oídos, se exprimía el jugo y se ponía en el oído, da buenos resultados, aunque si se tiene algún daño es mejor no echarlo. Preciosas fotos y como siempre estupenda información. Un besin muy grande.
Montse ha dicho que…
Tienes razón, los nombres a veces son espantosos, en cambio a esta planta el suyo le sienta de maravilla. Además me gusta ver como asoma por entre las grietas de los muros ¡es tan mona!
Un beso grande.
Lidia ha dicho que…
Hola Lola: por aquí también abunda mucho pero creo que no se usa, al menos yo no tengo noticia de ello. Muchas gracias por tu aportación y un beso muy grande.
Lidia ha dicho que…
Si que lo es; yo la encuentro encantadora. Lo tiene todo: medicinal, comestible y bonita ¿Qué mas se le puede pedir a una planta? Un abrazo
Plantukis ha dicho que…
Una información buenisima. Y me ha hecho gracia lo que dices con lo del tema de los nombres ya que esta mañana me ha pasado un buen ejemplo con una ficha que preparaba. Felicidades. Un abrazo
Cazadora de belleza ha dicho que…
Tengo una en mi terraza y me gustaría tener una tamb en mi balcón, cómo puedo hacerlo? se le corta una ramita y se pone en agua y echa raíces, se cogen las semillas de arrriba?
Lidia ha dicho que…
Lo del esqueje o ramita nunca lo he experimentado, quizá sea posible. Puedes probar y nos cuentas. Puedes ponerlo en agua o directamente en tierra de cultivo y ver el resultado. Yo así he ido experimentando y aprendiendo. Las silvestres se reproducen muy bien por medio de semillas. Si lo haces así, colócalas en tierra muy suelta y húmeda. Saludos y perdona la tardanza en contestarte.
Denis Garcia ha dicho que…
Sus hojas están buenísimas en ensalada, unos tomates, queso y hojas de ombligo de venus regados con aceite de oliva
Mari ha dicho que…
Yo las he plantado en maceta sacando unas ramitas con raiz de entre muros de piedra donde crecen. También he puesto hojas sueltas son raiz en una maceta que tengo en semisombra a ver que tal.
En verano con el calor desaparecen y en otoño vuelven a salir.
Lidia ha dicho que…
Hola Mari: muchas gracias por la información. Saludos.
Lidia ha dicho que…
Gracias Denis. Qué ensalada más interesante. Saludos.